Los representantes de los sindicatos CUT-A y CNT, Bernardo Rojas da Costa y Juan Torales respectivamente, solicitan la intervención "urgente" del director de la OIT a "raíz de la gravísima situación que viven los trabajadores paraguayos", mencionan en un comunicado.
Los mismos denuncian 2.500 despidos de forma "arbitraria e ilegal" de personas contratadas en forma indeterminada, dirigentes sindicales, mujeres embarazadas, en periodos posnatal, maestros de carrera docente y jóvenes, "todos despedidos por su calidad de dirigente, de su afiliación sindical o su activismo político".
Señalan que esta situación se está viviendo luego del juicio exprés que destituyó a Fernando Lugo de la Presidencia de la República el 22 de junio pasado. Los sindicatos califican el hecho como "golpe de Estado Parlamentario".
"Consumada la acción del golpe institucional, se inició contra los trabajadores paraguayos una impresionante reacción gubernamental y empresarial, constatada en la vulneración de los convenios de la OIT 87 y 11, ratificados por el Estado paraguayo, cuyo cumplimiento se encuentra en plena vigencia", alega el escrito.
Entre las instituciones del Estado que se dan los despidos, mencionan a Itaipú, Yacyretá, Secretaría de Acción Social (SAS), Essap, ANDE, IPS, Ministerio de Justicia y Trabajo, Ministerio de Educación y Radio Nacional del Paraguay.
También denuncian arbitrariedades en empresas del sector privado como Maehara S.A., frigorífico IPFSA, Banco Regional, Esso, Grupo La Victoria y Prosegur S.A.