El pavo es un invitado de honor en la mesa navideña. El consumo de esta ave viene desde los aztecas e incluso la forma de preparación se ha asociado con estas raíces. La carne de pavo es una de las más apreciadas, no solo por su sabor, sino por sus propiedades nutritivas, pues es baja en grasa, fácil de digerir y rica en proteínas.