En principio ya se encuentra habilitada en el nuevo predio, la farmacia social, con una amplia gama de medicamentos, al igual que el área de consultorios que cuenta con diversas especialidades, tales como: clínica médica, pediatría, ginecología y obstetricia, cardiología, odontología, oftalmología, traumatología, nutrición y la recientemente incorporada área de salud sexual y reproductiva, tanto para mujeres como para hombres.  

Este nosocomio, reformado y ampliado totalmente bajo la administración del Gobernador Pedro González Ramírez, es sin lugar a dudas una obra “impactante” que permitirá profundizar la calidad del servicio sanitario en la capital departamental de Amambay y alrededores, pues reúne inversiones trascendentales, como condiciones edilicias de primera calidad, con espacios ideales para el paciente internado y la familia, además de la efectiva incorporación de gran parte del nuevo equipamiento hospitalario y otras cuestiones tecnológicas de última generación que están próximas a integrarse.  

La habilitación total del nuevo predio está prevista para el mes de julio próximo.

“Querían hacer creer que sería una cascara vacía”

El gobernador de Amambay y principal propulsor de la mencionada obra, Pedro González Ramírez, durante su recorrido habitual por las instalaciones del centro asistencial, aseveró que "el futuro hospital Juan Pablo II no será una cascara vacía, como algunas voces en su momento indicaron. Desestimo así las declaraciones mediáticas de algunos actores sociales y políticos que se expresaron contrarios a la construcción del nuevo edificio, indicando que sería nada más que una cascara vacía".  

“Se creó una enorme expectativa en la población por la magnitud de la obra, y esa expectativa hoy estamos convirtiendo en realidad y estamos muy orgullosos, como Gobierno departamental, en cumplir con el compromiso asumido de mejorar la calidad del servicio de salud pública en el Amambay”, concluyó Pedro González Ramírez, gobernador de Amambay.