"La elevación discrecional e inconsulta a 83,40 metros de los funcionarios del lado argentino merece el pedido de informe y el rechazo de esta acción inconsulta", aseveró.
Según el mandatario paraguayo, "cualquier situación anormal perjudicaría el estado de las maquinarias de la represa, afecta la rivera" y Paraguay no acepta esa "acción unilateral".
Fruto de un tratado suscrito en 1973, la represa de Yacyretá sobre el río Paraná tardó 38 años en completarse y costó unos 12.500 millones de dólares.
La hidroeléctrica, en la que Paraguay puso un 80 por ciento del territorio y Argentina los fondos, cubre en torno al 20 por ciento de las necesidades energéticas argentinas.
El Estado paraguayo recibe anualmente compensaciones por la parte de su energía que cede a los argentinos, que en 2012 eran de 130 millones de dólares.
En enero pasado, Paraguay entregó una nota de protesta a Argentina porque aún adeudaba algo más de 80 millones de dólares de la cesión de energía en 2012, y se quejó de que el atraso en los pagos es "sistemático" y "casi se volvió una costumbre".
Las relaciones entre los dos países se complicaron tras la destitución del presidente paraguayo Fernando Lugo en junio pasado, que llevó a la suspensión de Paraguay del Mercosur por decisión de sus socios, Argentina, Brasil y Uruguay.