Aumentan los casos de accidentes de tránsito con derivación fatal en la ciudad de Pedro Juan Caballero
Contrariamente a lo que podría esperarse por las permanentes campañas de prevención y concientización, los accidentes de tránsito con resultado de muertes de las personas involucrados sigue en aumento en la capital de Amambay. Las estadísticas del Cuerpo de Bomberos Voluntarios son contundentes.
Fuente: elnordestino.com (reportaje completo en la edición impresa 37).
En una entrevista exclusiva con elnordestino.com, el comandante Isidro Zárate Pérez explica esta problemática ciudadana y anticipa las acciones que se tomarán conjuntamente a las autoridades locales, con la esperanza de mejorar los preocupantes índices de rescates por imprudencia de las personas involucradas.
Veinte años al servicio de la comunidad pedrojuanina
“Cada día nos estamos equipando para hacer un trabajo con mayor eficiencia, como el pueblo quiere. Sabemos que Pedro Juan Caballero creció mucho y hay más accidentes. Antiguamente los accidentes ocurrían sobre la avenida Teniente Herrero. Ahora por todos lados. Con la llegada del asfalto, los conductores se exceden en la velocidad. Muchas motocicletas no están en condiciones, no tienen frenos ni usan las luces, y por eso ocurren muchos accidentes”.
“En el año 2016 fallecieron treinta y cuatro personas como consecuencia de accidentes de tránsito. Diecinueve murieron por accidentes dentro de la ciudad y quince sobre la ruta V Bernardino Caballero. Es mucho para una ciudad de ciento veinte mil habitantes”.
Los trabajos de prevención y concientización
“Venimos trabajando junto a la Policía Municipal de Tránsito en la concientización sobre la importancia de usar casco protector. Lo que nosotros queremos es prevenir, no reprimir. Porque la represión no deja nada. Hay que hablarle a la gente y mostrarle la realidad de los accidentados en Pedro Juan Caballero”.
Las consecuencias de los accidentes en la comunidad
“En los últimos ocho años casi cuatrocientas personas fallecieron en accidentes de tránsito en nuestra ciudad. Es mucho. En el 2008 empezaron a llegar las motos y ahí empezaron los accidentes. Es el mayor motivo de muertes en todo el Paraguay, con más de dos mil personas por año. Y nuestra ciudad colabora con veinte, treinta… ahora ya llegamos a treinta y cuatro. Y esto es preocupante”.
“Además de las muertes, hay accidentados que tienen que seguir su tratamiento de recuperación por varios años. Y eso cuesta plata. Mucha gente ya quedó sin casa y sin bienes, porque los tuvieron que vender para acompañar la recuperación de un accidentado. Para comprar un pino con platino cuesta de quince a veinte millones de guaraníes. Y si no se tiene la plata, hay que vender la casa, la chacra, el vehículo. No es que la persona se accidenta y termina ahí. Si se muere, se termina; pero si sobrevive, comienza el calvario. Si no hay solvencia, hay que pedir limosna, hacer polladas, rifas… Más de cien personas andan por la calle vendiendo rifas para pagar un costoso tratamiento médico de recuperación que necesita un accidentado. Por eso tenemos que ver como minimizar este problema. Porque terminarlo, va a ser difícil”.
(Entrevista completa en la edición 37 - Febrero de 2017).