Jorge Méndez, titular de la cementera, en entrevista con Radio Nacional del Paraguay, explicó que las recaudaciones de la empresa han repuntado desde setiembre, mes donde se alcanzó la suma de 1.430 millones de guaraníes. En octubre la cifra fue de G. 955 mil millones, noviembre de G. 1.000 millones, hasta llegar a G. 1.283 millones, monto total alcanzado en el mes anterior.

El aumento de la producción, el control de la administración y la disminución del costo en la compra del fuel oíl, fueron algunas de las medidas que permitieron repuntar las ganancias, según Méndez.

PAGO DE DEUDAS

El titular de la INC informó además que la empresa mantiene un superávit en caja de Gs. 1.000 millones y ha podido pagar de una deuda histórica por servicios. En este sentido, a Petropar ya  le trasfirió un total de Gs. 14 mil millones y renegociaron la deuda; a la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), le fue entregada GS. 11 mil millones y logró también la renegociación.

La deuda de la INC con diversas entidades asciende la suma de 61 millones de dólares y uno de los planes a ejecutar para el ahorro de la  industria, es el aumento de la producción y el cambio de combustible. De llegar a concretarse el proyecto se estaría economizando 30 millones de dólares por año, lo que llevará a la cancelación completa del déficit actual

Finalizó agregando que tienen previsto importar cemento, con el fin de hacer negocios, asegurar la provisión y evitar el ingreso de contrabando, todo esto teniendo en cuenta los planes del Gobierno Nacional de impulsar proyectos de infraestructura.

Historia de la Industria Nacional del Cemento

La industria cementera en el Paraguay, antes de 1969 era explotada por VALLEMI S.A., empresa de capital privado. Tal empresa cayó en crisis en el año 1968 a raíz de una imposibilidad económica de seguir sosteniendo en funcionamiento una planta totalmente obsoleta y una administración con grandes deudas al Estado, lo que ha dado lugar a la intervención de la misma y posteriormente la determinación de su quiebra.

Con la quiebra de VALLEMI S.A., finaliza la primera etapa de la industria cementera en el país, que en sus comienzos fuera una iniciativa del sector privado. Pero que, debido a la ineficiencia de su administración, terminaron en la desastrosa situación de quiebra técnica industrial, económica y financiera, dejando desocupados a más de 700 funcionarios residentes en Puerto de Vallemí.

El gobierno nacional a fin de posibilitar la atención del creciente mercado interno, y visto el fracaso de la acción privada, ha tomado la decisión de contactar con la KRUPP – MACHINES de Alemania, para el suministro y montaje de una cementera constituida por 2 (dos) hornos vía húmeda, con capacidad total de 200.000 TN. Clinker/año.

La primera línea (Horno Nº 1) ha entrado en funcionamiento y producción en el año 1969 con una capacidad de 100.000.- TN. Clinker/año, la segunda línea (Horno Nº 2) se pone en marcha en el año 1972.

La capacidad de producción instalada en la planta de vía húmeda ha satisfecho el mercado interno hasta el año 1976 (200.000 TN/Año), ocurriendo las primeras importaciones para complementación a la producción nacional, a partir de año 1977.

El desarrollo del proyecto para la construcción de una represa hidroeléctrica entre Brasil y Paraguay, entonces exigía soluciones inmediatas al problema del abastecimiento de cemento al país, ya que dicha obra, paralelamente a las necesidades de cemento propias de la misma, tenia perspectivas de convertirse en un importante factor multiplicador de la economía nacional, lo que efectivamente se ha verificado al final de la década del 70 y durante los 80.