Este escenario de reapertura gradual del paso fronterizo está pensado en el hecho de que los dueños de la mayoría de los comercios en Ciudad del Este y ciudades aledañas viven al otro lado del puente. Y como no pueden pasar a este lado, sus negocios y empresas cerraron.

“Acá tenemos dos problemas: abrimos todo y nos morimos todos de Covid; o mantenemos todo cerrado y nos morimos de hambre”, sostuvo el Dr. Carlos Torrás, coordinador médico y de organización de la atención prehospitalaria de casos de Covid19 en Alto Paraná. Es partidario de buscar un término medio y tratar, de acuerdo con lo que vaya ocurriendo en las fases de la cuarentena, “que se abran las fronteras, o el puente o los comercios de forma gradual y con controles sanitarios estrictos”. Esto implicará la toma de pruebas diarias de Covid19 a todo aquel que ingrese con el fin de emitir una autorización sanitaria temporal.

“Si hacés pruebas y das un registro o cédula sanitaria que se pueda utilizar, que dure cuatro o cinco días, se puede hacer eso. Pero no vamos a poder abrir para el público en general”, explicó Torrás, poco después de salir de una teleconferencia que mantuvo con sus pares brasileños y en la que autoridades departamentales y estaduales hablaron de acordar un protocolo sanitario común junto a representantes de las cámaras de comercio de ambos países.

“Si pensamos así vamos a hablar del tratado del Mercosur que dice libre tránsito hasta 12 kilómetros del lado de la frontera. Sobre esa base se puede ver la forma de habilitar el puente para que ciudadanos que habitan en Ciudad del Este y ciudadanos que habitan en Foz de Yguazú tengan un tránsito un poquito más regular; pero no tampoco libre”, expuso. Insistió en que esta eventual flexibilización debería ser una estrategia multisectorial y bilateral entre ambas ciudades. Esto a la luz de que en Brasil “no están teniendo restricciones como las nuestras”.

Como el tráfico clandestino en la frontera sigue campante, la idea es controlar a los ciudadanos que quieran cruzar; se sometan a los test cuyos resultados se darían en 24 horas. “Si Foz de Yguazú se pone las pilas y dice: a todos los que entren a Brasil les vamos a hacer el test o a todos los que pasen a Paraguay se les debe hacer el test, ahí vamos a tener un control por más de que no se tengan los resultados inmediatamente. Pero si tenemos una respuesta o una solución en 24 horas, uno puede esperar en un hotel durante ese tiempo. Entonces, ahí se le habilita para que esté en Ciudad del Este o en Foz de Yguazú”, señaló.