Como en años anteriores, miles de fieles acompañaron la celebración en la explanada donde se encuentra la imagen de la Virgencita Milagrosa de Caacupé en el predio de la estación de servicios Futurista en la entrada a la capital de Amambay. Foto: Diego Lozano.
Después del rezo del Santo Rosario de la Alborada se celebró la Santa Misa con la participación de cientos de fieles que pernoctaron en los alrededores del Santuario de la Estación de Servicios Futurista. Foto: Diego Lozano.
La popularidad de la Virgen de Caacupé es la más importante dentro de devocionario católico de la nación guaraní. Por tal motivo, esta imagen de la Virgen María está consagrada como la Patrona y Señora Protectora de Paraguay. Foto: Diego Lozano.
Las características de los pueblos del interior, así como su identidad cultural o folklórica y la continuidad de la tradición española, se manifiestan con la función patronal. La madre de los paraguayos es la Virgen de Caacupé. Foto: Diego Lozano.
Su recordación popular comienza con nueve días de anticipación, durante los cuales se reza el rosario, las campanas de la Iglesia acompañadas de las explosiones de bombas, cohetes y fuegos artificiales como anuncio del inicio de la Fiesta Patronal. Foto: Diego Lozano.
La vigilia que se corona con la tradicional Serenata a la Virgen: donde hay bailes típicos grupos folklóricos, alguno de ellos con arpa paraguaya. Los devotos acompañan este canto, de esta manera especial, saludan y homenajean a la Virgencita Azul. Foto: Diego Lozano.
La homilía del monseñor Óscar Páez destacó los valores de la familia cristiana como pilar de la sociedad, recordando la importancia que significa la presencia y el acompañamiento de los padres en la vida de los hijos, que son el futuro de la Nación. Foto: Diego Lozano.
El fanatismo no conoce de edades. Como viene ocurriendo desde hace años con quienes hoy son mayores, los más jóvenes también expresan abiertamente su devoción a la Virgencita Milagrosa de Caacupé. Foto: Diego Lozano.
La Iglesia confía en los jóvenes. La Iglesia quiere acompañarlos y quiere estimular la participación de los jóvenes en la construcción de un mundo mejor. Hoy más que nunca, los jóvenes son la esperanza de la Iglesia. Foto: Diego Lozano.
La Virgencita Azul de Caacupé Patrona del Paraguay, es el Guardián Silencioso del Paraguay, es decir el Ángel que custodia el Concepto Inmaculado de armonía, pureza y perfección para este país y todos sus habitantes. Foto: Diego Lozano.