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Lunes 11 de Julio del 2016
Capitán Bado y su gente, un gran presente y un mejor futuro en el nordeste de Paraguay
Ubicada en el extremo nordeste de la subregión Norte del país, fronteriza con la República Federativa del Brasil, la ciudad de Capitán Bado, uno de los tres distritos que configuran el Departamento de Amambay, remota sus orígenes al siglo XIX con la denominación de Ñu Vera.
Capitán Bado y su gente, un gran presente y un mejor futuro en el nordeste de Paraguay
Acto Oficial por el 102 Aniversario de Capitán Bado al pie del monumento en la rotonda de uno de los accesos a la ciudad. (Foto: Diego Lozano).
Fuente: elnordestino.com (edición impresa).
Ñu Vera es una toponimia guaraní que expresa características ecológicas derivadas de que la población inicial se asentara en la cabecera del Río Ypane, en la parte más alta de un campo poblado de espartillos. Prácticamente en los límites de la administración central de la Empresa Mate Laranjeira capitaneanda por Tomás Laranjeira, un discutido personaje de la época que por aquí sentó sus reales para la exportación en gran escala  de la yerba mate.

Los rayos solares aquí se centraron para inspirar a los indios guaraníes para bautizar el sitio con el nombre de Ñu Vera. La expresiva lengua guaraní haciendo gala de naturaleza monosilábica aglutinante expresa matices de brillo: Ñu, sustantivo traducido en Campo Vera, adjetivo calificativo que significa brillante/brilloso. Consecuentemente, Ñu Vera, en idioma español, significa “Campo Brillante”. Todo, quizás debido al hecho de que este campo en particular, cubierto de espartillo, una especie de paja que, durante el día, brilla con los rayos solares, y a la noche, a la luz de la luna.

En los años 1892/93, el brasileño Tomás Laranjeira implantó una administración de la empresa que lleva su apellido, con el primordial objetivo de extender la explotación y comercialización de la Yerba Mate (Ilex Paraguayensis), una especie nativa por aquel entonces solamente existe en esta región de la América del Sur, gracias a la cual fue basada la economía de todo el vasto Estado de Mato Grosso y, por añadidura, dio origen al surgimiento de importante núcleos poblacionales en el norte – nordeste del Paraguay. Como Punta Porã (hoy Pedro Juan Caballero) y su homónima Ponta Porã, ciudad brasileña que hasta el presente momento mantiene intacto su nombre en idioma auténticamente guaraní.

A más, desde luego, de Ñu Vera que, a partir del 25 de Julio de 1914, pasó a llamarse Capitán Bado.  Esto, en virtud del Decreto N° 87, firmado en la misma fecha por el entonces presidente de la República, Eduardo Schearer, en homenaje al capitán José Matías Bado, un pilarense que tuvo una destacada actuación durante la guerra contra la Triple Alianza.

Con trabajadores brazales provenientes de San Estanislao, Unión, San Pedro y Concepción, “reclutados” por Tomás Laranjeira para explotar los yerbales por éste arrendado en San Fernando (hoy Cerro Cuatia), San Alfredo y otros puntos de esta  frontera, se dio base a la formación de las primeras familias genuinamente badeñas.

Estas, de acuerdo a un manuscrito que consta en archivo personal de Calixto Bóveda (un pionero vivo de la ciudad) fueron: Los Zalazar, Ferreira, Martínez, los Benítez, Gill, Rodríguez, Mengual, Lechuga (español); los Canaan, Bueno, Roja; los Carneiro, Oliveira y los Servián, por un lado.

La nómina de las primeras familias radicadas en de Capitán Bado, prosigue con los Gauto, Delgado, Sanabria, Suárez, y los Sánchez. Continúa con los Aguayo, Acosta, Godoy, Ramírez, Velásquez, Valiente, Franco, Dávalos, Varela, Arteta, Sgaib, Bóveda y Taboada. De San Pedro, los Grau y la familia Mateus. De San Estanislao los Menesses y los Venialgo. De Lima, la familia Arzamendia. De Villarica y Coronel Oviedo proceden los Chamorro y Brítez. De Concepción los Cantaluppi, Ibáñez y Núñez. De Itacurubi de la Cordillera la familia Urbano Palacio y de Asunción la familia de Juan Félix Cabrera y el coronel Eugenio A Garay.

Antonio Delgado, destacado intelectual de origen concepcionero, falleció en marzo del 2000, en Amambai, Mato Grosso do Sul, se dedico a ejercer la profesión de periodista, profesor de lenguas extranjeras en instituciones educativas  de nivel superior; agrimensor, topógrafo y teólogo en iglesias evangélicas de Amambai, sin que nunca haya perdido su condición de paraguayo, su nombre fue dado a la amplia y moderna terminal de ómnibus  de la ciudad de Amambai.

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